Javier Tomeo camina con dificultad, pero sigue siendo ese maño grandón que escribe de manera inconfundible, cuyas novelas se representan en el teatro, que tan bien se le conoce en Francia y Alemania y que curiosamente no tiene ningún premio y ninguno de esos llamativos, Nadal, Cervantes, Planeta, nada. Los cuentos completos se publicaron hace unos meses, y en la presentación de la librería Laie en Barcelona, al escritor se le vio agotado pero con un resto de ironía en cada palabra y en cada frase, nadie podía intuir entonces que esas eran las últimas palabras, a pesar de que Paginas de Espuma y Alpha Decay le devolvieron a los escaparates de las librerías, alargándole la vida y obligando a ese cuerpo de cazador a acudir a los actos literarios, dolorido y agotado . Acompañándolo en Barcelona se sentaron entonces a la mesa Juan Casamayor el editor de Páginas de espuma y Daniel Gascón que ha trabajado esa edición de forma impecable, y dirigía de alguna manera la charla. ( Elías Gorostiaga).