De Cervantes lo hemos leído casi todo pero sabemos muy poco de él. Es un personaje que se nos escapa entre las brumas de su biografía. En Cervantes hay más dudas que certezas, más enigmas que seguridades. Y esto sin duda lo hace más atractivo porque nos anima a seguir buscando nuevas pistas que arrojen luz sobre su vida. Es revelador que Shakespeare, contemporáneo de Cervantes, haya sido también objeto de numerosas conjeturas sobre su existencia y su obra, hasta el punto de que se ponga en duda la autoría de los libros que se le atribuyen, lo que no sucede con el creador del Quijote. ( Javier Carrasco).