La contaminación del medio ambiente se ha incrementado considerablemente desde el inicio de la era industrial hasta nuestros días. El suelo, el aire, y el agua (superficial y subterránea) se han visto afectados por el uso indiscriminado de pesticidas, herbicidas, y compuestos orgánicos. Metales pesados como el plomo (Pb), cromo (Cr), mercurio (Hg), cadmio (Cd), arsénico (As), etc., han sido introducidos al medio ambiente debido al desarrollo e implementación de las diferentes tecnologías en los diversos procesos industriales. Asimismo, el incumplimiento de las normas oficiales respecto al manejo y deshecho de los residuos industriales y químicos ha contribuido a la acumulación de estas substancias en los diferentes ecosistemas alcanzando algunas veces niveles tóxicos que ocasionan daños irreparables en los organismos vivos. ( Martha Laura López).*
