El pasado dos de marzo, el Ateneo de Madrid, bajo los auspicios de la Agrupación Ateneísta “Juan Negrín», presentó un libro de carácter especial, por el tema que estudia, y por el prisma particular y especialísimo bajo el que se presenta. En dicha presentación intervinieron Luis Montes (Médico del Hospital Severo Ochoa de Leganés y Presidente Federal de la asociación “Derecho a morir dignamente”) Juan José Tamayo (Teólogo y Profesor de la Universidad Carlos III) y Antonio Piñero (Escritor y Catedrático de la Universidad Complutense de Madrid) Antonio Monclús (Escritor y Catedrático de la Universidad Complutense de Madrid) El acto fue presentado por la Agrupación Ateneísta “Juan Negrín” en la persona de Alma Pagés, escritora.
Con estas figuras de nuestra filosofía y medicina, de más está decir que La Eutanasia, una opción cristiana, el libro del profesor Monclús, congregó a un representativo número de personas interesadas en el tema.
La Eutanasia, una opción Cristiana. Debate en el Ateneo.
Al interés contribuyeron los participantes en la presentación explicando a los asistentes no sólo parte del contenido del libro, que es un recorrido por el significado de la eutanasia, desde el punto de vista filosófico, humano y cristiano, sino además porque apuntaron ideas a valorar por el público.Así, después de la presentación de Alma Pagés quien hizo una referencia a los escritores clásicos para situar el concepto de la muerte como algo natural y exento del sentimiento de dolor que tiene en el pensamiento cristiano, el profesor Tamayo insistió en la definición de este libro como un libro valiente, arriesgado y provocador, ya que presupone que la eutanasia es un acto de profunda compasión cristiana; una idea que resultará innovadora, y a buen seguro no muy comprendida, dijo, por la ortodoxia religiosa actual.
El profesor Piñero, además de destacar el estudio comparado que hace el autor del término a lo largo de la historia, se refirió al profundo conocimiento y desarrollo en el libro por parte del profesor Monclús de los textos clásicos, griegos, latinos, y por supuestos de la teología medieval, para apoyar su tesis. El Doctor Montes, que dijo participar profundamente de la idea del libro sin ser un filósofo, se refirió al acto de la eutanasia para hablar de las diferentes actitudes frente a la muerte, y a la necesidad del respeto a la individualidad del ser humano en un suceso de tal magnitud; comentó que la muerte de un ser humano debería ser el más libre porque es el único en el que está realmente frente a sí mismo.
Finalmente, el autor tomó la palabra para explicar su intención con este libro, que no es otra que facilitar la comprensión de un hecho, que dijo que, más que ser una opción cristiana en la actualidad, debería serlo, si reflexionamos en lo que significa el término de “com-pasión”, como misericordia; y la misericordia, dijo, que es un valor cristiano, debería entrar de lleno en comprender que empieza por no dar lugar al sufrimiento.Posteriormente se estableció un debate entre los asistentes, en el que se matizaron algunos términos, y se explicaron con más amplitud los conceptos de “buena muerte”, o la idea equivocada de que hay que morir con sufrimiento, cosa que –según el profesor Monclús- no está ni en la doctrina de Jesús, ni en sus palabras.
Amando Carabias
marzo 10th, 2011
No me considero excepcionalmente preparado en este ámbito, pero no me sorprende la tesis apuntada en este libro.
Según mis propias conclusiones, el cristianismo debería estar más a favor de dejar morir que de prolongar absurda y tercamente una vida cuando ésta no tiene sentido.
Por alguna razón que nunca he sabido a qué se debe, desde la iglesia se prefiere el sufrimiento inútil.
Me parece perfecto que se puedan escuchar opiniones que pongan las cuestiones bajo el prisma adecuado.
Angeles
marzo 11th, 2011
La muerte digna o facilitar que el final del ciclo de la vida, normalmente duro por lo que supone de alteración grave de las funciones vitales, sea lo menos desagradable posible, es para mi como profesional sanitario INCONTROVERTIBLE . Máxime hoy día que la ciencia permite una esperanza de vida muy elevada por tener medios para aliviar males hasta hace poco mortales.
Enhorabuena a los cristianos que evolucionan con los tiempos y no se quedan anclados en la letra del pasado.
Isolda
marzo 11th, 2011
No puedo más que ratificar lo dicho por los que me preceden. Personalmente, me parece incuestionable.
Muy interesante.
Beatriz Ruiz
marzo 15th, 2011
Sin tener en cuenta lo de «opción cristiana» por razones que no explicaré aquí, no tengo ninguna duda al respecto. La eutanasia es un acto de compasión. No entiendo que tengamos que «sufrir» incluso para morirnos. No tiene sentido.